El Fascinante Mundo de la Manipulación

Hace mucho que no escribo y no es por falta de ganas, pero la dedicación plena a mis consultas privadas hace que el tiempo se me pase volando sin apenas darme cuenta!

Lo que hoy te voy a contar es sobre el fascinante mundo de la manipulación.

Desde mi perspectiva me atrevo a calificarlo de fascinante ya que el desenmascarar el porque nos manipulan o nos manipulamos no es algo sencillo de expresar ni de entender. Aquí es donde están nuestras sombras, espejos, maestros cuyo propósito es enseñarnos lo que no estamos queriendo ver. ( claro que este es un trabajo muy profundo y hay que ser muy valiente para hacer el recorrido completo hacia tu interior esencial).        

En este caso me refiero al mundo de las relaciones. El cómo abordamos la dependencia emocional y sus derivados tóxicos. Me atrevería a decir que el 99% de la población se ha sentido manipulada alguna vez y lo más peligroso es las muchas veces que manipulamos sin que nos demos cuenta.

Actuamos en tres niveles cuando nos relacionamos, Mente-Alma-Espíritu, pero de lo que no somos a penas conscientes es de que la mayor parte de las veces lo que nos mueve a crear situaciones de rechazo y sufrimiento es la desconexión con esa parte de nosotros que dirige nuestros actos.

Me refiero a que cuando nos sentimos desgraciados por causa de una relación ya sea personal o laboral el patrón que seguimos es poner el foco en lo que nos han hecho o dicho y todo lo interpretamos a través de los ojos de nuestra mente (agotada, saturada e inmadura).

Lo que sale de esto es amargura e infelicidad  que cuando se sostienen en el tiempo generan reacciones desmesuradas, conductas evasivas (para no pensar…para no sentir).

La toxicidad-dependencia emocional están presentes en toda manipulación, y los ingredientes más habituales son la rabia, las mentiras, amenazas, resentimientos, odio.

Y cada día somos menos inmunes a esta ansiedad emocional que  nos desborda.

Toda ansiedad emocional viene de un gran vacío interior que no hemos sabido o querido llenar (por apatía, desidia o ignorancia). La Desactivación emocional conlleva pagar un precio muy alto en la Vida.

En mi opinión la infelicidad personal tiene cura, y me atrevo a afirmarlo tajantemente.

La soledad, el estancamiento, los problemas de convivencia se deben en gran parte a una ineficaz comunicación con nosotros mismos. Si te sientes herido por lo que te han dicho o hecho, en realidad una parte de ti está reclamando tu atención, tu compañía, tu consuelo.

 

El decidir querer abrir una puerta nueva en tu Conciencia para abordar desde la Sabiduría y no desde el victimismo lo que te está pasando es un paso fundamental para Activar una red de recursos latentes que no tenías ni idea que tuvieras.

 

¿Pero cuál es uno de los mayores obstáculos que nos encontramos?

La Dependencia Emocional.

Utilizamos con mucha frecuencia y sin darnos cuenta la comunicación violenta que nada tiene que ver con decir palabrotas o descalificativos, si no frases como  “Sólo piensas en ti”, “Con lo que me preocupo por ti y así me lo pagas”, “Trabajo todo el día para complacerte y encima me recibes con esa cara”. “No te has acordado de llamarme antes de la reunión, eso es lo que te importo”. “Llevo 20 años en esta empresa y ni siquiera me toman en cuenta”.

Con estas frases no estamos asumiendo la responsabilidad de nuestro “Estado de Animo ni de nuestra actitud” y se lo cargamos a la otra persona.

Ponemos continuamente nuestras expectativas en el “otro”. Le entregamos el  poder de nuestra felicidad o amargura al otro, y eso conlleva una manipulación constante de pena-culpa-pena que nos desborda.

 

A veces nos ponemos enfermos inconscientemente para desatar también inconscientemente nuestra manipulación al otro. Es un ejemplo clásico de victimismo para llamar la atención.

 

¿Y a donde nos lleva esto? Pasividad y Victimismo una lacra en esta sociedad actual.

Nos convertirnos en “Agujeros Negros” que por mucho que nos hagan o digan a nuestro favor no nos sentimos saciados con nada.

Vacío Interior, Agujero Negro… ¿De dónde crees que vienen?

No  creas que tu insatisfacción y falta de plenitud o desequilibrio interno vienen de tu pareja o de tu trabajo… Lo que percibes de las situaciones o personas que tienes ahora mismo a tu alrededor son consecuencia de tus proyecciones internas no sanadas que no quieres ver en ti y rechazas en los demás.

“Te necesito para ser feliz” “Sin ti no puedo vivir”….Frases que nos encadenan y manipulan a una infelicidad sutil.

Y si pensara “Quiero estar contigo porque soy Feliz”.  Como decía el profeta “Beberemos de la misma botella pero no de las misma copa”. “Dos palomas atadas de las patas no pueden volar”.

Aceptar que necesitas emocionalmente al otro será “saludable” siempre que te correspondan. Pero cuando esto no es así…y seguimos necesitando, la dependencia se frustra y saldrá ese niño herido que llevamos dentro pidiendo a gritos que alguien lo quiera.

“Ese niño movido por un patrón de carencias afectivas que no ha sido rescatado de su calabozo interno”.

Aquí debes darte cuenta que necesitas reconocer tu incapacidad emocional  para gestionar tu vida, que lo que considerabas que era de tu dominio no lo es en absoluto, y que si seguimos echándole las culpa al otro nos distanciaremos mucho de lo que es el verdadero Amor.

Si te sientes atrapada, bloqueada, perdida, dependiente, mira en tu interior, pide ayuda, pero no sigas viviendo con la misma MENTE. Es Imposible que rehagas tu Vida desde el mismo patrón emocional que te ha llevado a donde estas ahora.

Tú eliges la vida que quieres tener, si no estás teniendo la vida que quieres te aseguro que no estas eligiendo…estas actuando desde tu niña interior herida y desprotegida, estas atrapada bajo una programación inconsciente que maneja los hilos emocionales de tus estados internos y de tu conducta.

Cuando apuestas por tu crecimiento interior, por tu sanación emocional  comienzas a disfrutar de una exquisita paz interior y confianza hacia ti mismo que envuelve tu entorno, y las cosas y los  actos  pequeños te nutren  te llenan y  la calidad de tu vida no solo mejora sino que sientes una alegría espontanea que te gustaría retener para siempre. Y  todo esto no se produce por nada externo…todo esto viene de dentro.     

Victoria Muñiz

Terapeuta Especialista

en Bioneuroemoción , Terapia Regresiva  trabajo profundo del Niño Interior.

www.victoriabio.com