Alexitimia la parálisis emocional que nos desconecta

La definición de Alexitimia designa la incapacidad de corresponder las palabras con las emociones y las características más comunes son una pobre conciencia emocional, dificultad para expresar verbalmente los sentimientos, escasa vida imaginativa, pensamiento concreto centrado en detalles externos y con poca creatividad y distorsión de la autoevaluación.

La característica más importante de la alexitimia es la incapacidad para expresar las vivencias internas en palabras, ensueños y fantasías.

La finalidad al escribir este post  no es más que abrir un espacio de reflexión para que indaguemos en  partes de nosotros que necesitamos trabajar.

La Alexitimia es mas común de lo que parece, afecta a una de cada siete personas, y no hace falta que tengamos un diagnostico clínico para darnos cuenta que muchas personas sin ser conscientes tienen características que se pueden asociar con este trastorno.

Según un test elaborado en Toronto podemos comprobar con estas frases( respondiendo en positivo) si en estos momentos nos sentimos identificados con esta incapacidad.

A menudo estoy confuso con las emociones que estoy sintiendo. 

Me es difícil encontrar las palabras correctas para mis sentimientos. 

Tengo sensaciones físicas que incluso ni los doctores entienden . 

Cuando estoy mal no sé si estoy triste, asustado o enfadado. 

Me es difícil expresar lo que siento acerca de las personas.

Prefiero ver espectáculos simples, pero entretenidos, que dramas psicológicos.

 Encuentro inútil examinar mis sentimientos para resolver mis problemas personales.

Seguramente que en estos momentos hay muchas personas deseando saber cómo darle salida de una manera saludable a todo lo que llevan años reprimiendo.

Personas que han aprendido a huir del dolor, a no enfrentarse con sus conflictos internos y a no permitirse expresar sus sentimientos más profundos.

Reconozco que siento mucho amor y ternura por todos aquellos que no se conforman con reconocer esta especie de parálisis emocional y me produce una enorme satisfacción que se atrevan a dar pequeños pasos cada día siendo conscientes del poder que genera el atreverse a penetrar en su mundo interno para encontrarse con espacios agridulces de aprendizaje y sombra donde no solo se crece como personas sino que nos abrimos a que los demás crezcan con nosotros.

No existen reglas concretas a seguir, la madurez emocional se consigue dando pasos.

Una vez identificada la incapacidad en una situación concreta, el pararse a realizar un pequeño autoanálisis es lo más importante. A partir de ahí podemos ver la forma de actuar diferente a ocasiones anteriores. Poner límites, decir lo que sentimos con asertividad, escribir lo que nos pasa, y activar una nueva conducta que nos lleve a sentir una energía diferente son algunas pautas que nos harán salir de cualquier parálisis emocional.

Cada día es más importante revisar nuestra conducta en nuestra vida diaria, me refiero al catálogo de reacciones cargadas de ira, rabia o nuestros miedos a la hora de afrontar situaciones que repetimos casi sin darnos cuenta.

La ansiedad, el insomnio la baja autoestima vienen de emociones archivadas o vivencias cargadas de conflicto interno que no hemos sabido gestionar en el momento justo.

Y sucede que La Vida (Sabiduría Infinita) nos va poniendo delante las mismas personas con diferentes cuerpos o las mismas situaciones en diferentes lugares para permitirnos de una vez aprender y despertar a una versión de nosotros mismos más abierta, mas autentica y mas libre.

Feliz Camino

Victoria Muñiz

Terapeuta en Bioneuroemoción, Terapia Regresiva a  Infancia (trabajo profundo con el niño interior), Coaching personal.

www.victoriabio.com  

Autora del programa On Line » 21 días Viviendo Consciente», un curso que cambiará tu cerebro, tu mente y tu vida.